La
edad no es la culpable, solo una variable más: tener más de sesenta años no
lleva implícita una condena a sufrir COVID-19, son unas determinadas
condiciones de salud las que hacen que el coronavirus se vuelva más peligroso.
Es
cierto que los mayores son físicamente más vulnerables, pero me gustaría
recordar que, aun siendo vulnerables, la mayor parte de ellos están bien y la
mayoría de los afectados supera la infección por coronavirus.
No
se trata de disfrazar la realidad, sino de no contribuir a victimizar con sermones
alarmistas o fatalistas que dejan al margen el hecho que muchos mayores están
bien y que, también a determinadas edades, es posible superar el contagio. Una
cosa es la fragilidad de un grupo de riesgo a nivel físico y otra es que lo sea
para todos los aspectos vitales. Seguro que hay gente mayor más empoderada y
más capaz de hacer frente a esta situación que muchas personas jóvenes.
Vivir
en soledad y salir poco o nada a la calle es una circunstancia habitual para
muchos ancianos. Me pregunto si realmente notaran mucho más su soledad. No lo
sé; lo que creo es que ahora nosotros somos más capaces de experimentar el
aislamiento y la soledad que sufren muchos de ellos a diario.
Ante
la buya que están generando tantos datos y declaraciones sobre la pandemia, creo
que para hacerlo sencillo debemos seguir tres pautas para que el anciano no se
sienta víctima de la situación:
1. Programar
el día. Planificar tareas, tanto físicas como intelectuales, siempre que sea
posible; buscar actividades de ocio que proporcionen placer y bienestar;
promover las relaciones sociales a distancia a través conversaciones
telefónicas o vía internet.
2. Mantener
un pensamiento positivo; entender que existen recursos para afrontar de forma
positiva la pandemia, que esta tendrá un final.
3. Favorecer
el apoyo mutuo, porque los mayores también pueden ayudar. Es necesario
estimular su fantasía en ejemplos aceptables.
Para
este tercer numeral, he querido hoy poner un ejemplo, no inventado sino tomado
de la Biblia, para ello hablemos de Eliseo:
Elías
le dijo que pidiera lo que quisiera. Entonces Eliseo tuvo la sabiduría de
solicitar una doble porción de la sabiduría de Elías. Vio cómo el carro de
fuego arrebataba a su amo; tomó el manto que Elías había dejado caer, y con él
golpeó el Jordán, el cual se abrió. Eliseo atravesó el río, y pasó a la ribera
occidental 2reyes 2:1…18.
Una
serie de hechos sobrenaturales marca la carrera de su ministerio: milagros de
conocimiento, o milagros de poder, todos ellos cumplidos expresamente en nombre
de Jehová. Su ministerio, fue de influencia notoria en la vida política de
Israel.
Los
milagros de Eliseo, superan en número a los que realizó Elías. Eliseo completa
la obra de Elías destruyendo en esa época el culto a Baal. Muere durante el
reinado de Joás, lamentado por el pueblo y el rey. Los milagros de Eliseo
tuvieron lugar en una época en que la religión de Jehová estaba enfrentada de
una manera total contra el culto a Baal. De la misma manera que los milagros de
Elías, los de Eliseo tenían el propósito de manifestar la autoridad del profeta
y de presentar al Dios viviente. Este poder sobrenatural de Eliseo era de tal
manera que podía usarlo libremente; de la misma manera que Cristo lo empleó
frecuentemente en sencillos actos de misericordia.
Veamos
la serie de milagros o acontecimientos hechos por Eliseo:
·
En el
nombre del Jehová: sanó con sal las aguas de la fuente de Jericó 2 Reyes 2:19…22.
·
Unos
muchachos se burlaron del profeta y los maldijo en nombre del Señor. Dos osos
descuartizaron a 42 de estos jóvenes 2 Reyes 2:23…25.
·
Predijo
el éxito de la expedición en contra de Moab 2 Reyes 3:11…27.
·
Multiplicó
el aceite de una viuda 2 Reyes 4:1…7.
·
Anunció
el nacimiento de un hijo a una sunamita; cuando este hijo murió, la oración de
Eliseo lo reclamó a la vida 2 Reyes 4:8…37.
·
Él
indicó un antídoto contra la planta venenosa que estaba en el alimento de los
profetas 2 Reyes 4:38…41.
·
Durante
una hambruna, el profeta alimentó a 100 hombres con 20 panes de cebada y
algunas espigas nuevas 2 Reyes 4:42…44.
·
Ordenó a
Naamán que se bañara en el Jordán para sanarse de la lepra 2 Reyes 5:1…19, y
anunció a Gizei que esta lepra se quedaría pegada siempre a él debido a su
codicia.
·
Hizo
flotar en el río Jordán el hacha que había caído al río 2 Reyes 6:1...7.
·
Reveló
al rey de Israel los movimientos e intenciones de sus enemigos, 2 Reyes 6:8…12.
·
En
respuesta a la oración de Eliseo, el Señor abrió los ojos de su siervo para que
viera los carros y caballos de fuego que los protegían 2 Reyes 6:13…17.
·
Eliseo
hirió de ceguera a los hombres que el rey de Siria había enviado para que lo
detuvieran 2 Reyes 6:18…23.
·
Declaró,
antes que nadie, que un emisario del rey de Israel estaba a la puerta para
quitarle la vida 2 Reyes 6:32…33.
·
Durante
el hambre del cerco de Samaria, predijo que al día siguiente los víveres serían
abundantes y baratos, añadiendo que el oficial incrédulo, que se burló de esta
profecía, lo vería, pero no lo disfrutaría. Una multitud aplastó a este
oficial, que murió ante la puerta de Samaria 2 Reyes 7.
·
Eliseo
hizo saber que Ben-adad, rey de Siria, moriría 2 Reyes 8:7…15.
·
Anunció
la destrucción de Acab y su casa; envió a un joven profeta a que ungiera a
Jehú, que debería ejecutar el juicio predicho 2 Reyes 9:1…10; 28.
·
Eliseo
reveló por adelantado que habría 3 victorias sobre los sirios 2 Reyes 13:14…19.
·
Finalmente,
un cadáver que había sido arrojado apresuradamente en la tumba de Eliseo volvió
a la vida al tocar los huesos de Eliseo 2 Reyes 13:20…21.
Todo
este poder, y una vida acompañada de hechos sobrenaturales, no impidió a este
gran varón de Dios, que un día «quedara enfermo de la enfermedad de que murió»
2 Reyes 13:14.
2
Reyes 13:14…21 aquí se encuentra la última mención que se hace de Eliseo. El
texto solo dice una enfermedad, guarda silencio al respecto que enfermedad,
pero fue una enfermedad terminal porque Eliseo muere a causa de esta
enfermedad.
Por
último, en 2 Reyes 13:20…21 leemos que después de muerto Eliseo, israelitas en un
cortejo fúnebre fueron atacados por los madianitas y tuvieron que huir
arrojando al muerto a la tumba de Eliseo. Lo más llamativo del caso fue que el
muerto resucito, la Biblia no nos dice su nombre, pero sí que cuando entro en
contacto con los huesos de Eliseo revivió y se levantó 2 Reyes13: 21.
La
historia entera de Eliseo nos recuerda que los efectos de una vida virtuosa
perduran en obras que siguen aún después de la muerte. La influencia de hombres
y mujeres piadosos y espirituales siempre se refleja en la vida de sus
contemporáneos como en las de otras personas que nacieron y vivieron después.
Concluyendo:
Una lectura como la anterior deja tanto en que reflexionar no solo a un
anciano, a todos y son parte para platicar en esta pandemia.
Es
tiempo de testificar y un anciano tiene mucho testimonio, motívalo a contar su
historia eso lo hará sentirse útil.
No hay comentarios:
Publicar un comentario