viernes, 19 de abril de 2019

Ánimo, Si Sabemos, Podemos Ser Buenos Mayores


Envejecer es un proceso biológico el cual empieza en el momento en que el ser humano nace. A lo largo de su vida el ser humano atraviesa diferentes etapas hasta llegar a la vejez, durante todas estas etapas se experimentan cambios físicos, biológicos y psicológicos.

De todos es conocido que al ir llegando e irse desarrollando periodo, se van presentando problemas con los adultos mayores que se convive. Dentro de ellos, por las observaciones realizadas, predominan problemas relacionados al aspecto psicológico, específicamente los estados de ánimo.  

A medida que se sobrepasa los 65 años, edad en que empieza la etapa denominada Adulto Mayor, la probabilidad de que en los próximos años aparezca una limitación en la funcionalidad del individuo es cada vez más alta.



Este tipo de limitaciones funcionales afecta todas las capacidades del adulto mayor, tales como:
-        Físicas: coordinación, equilibrio, flexibilidad, fuerza, pérdida de masa muscular, debilitamiento del sistema inmune, etc.
-        Psicológicas: baja autoeficacia y autoestima, aumenta depresión, ansiedad, irritabilidad, Alzheimer, Parkinson, amnesia, estrés, disminución del nivel de atención, disminución de respuestas a estímulos, alteración de la calidad sueño, etc.

El aspecto psicológico en el adulto mayor es de gran importancia ya que se pueden evidenciar cambios en sus estados de ánimo, aumentando el nivel de ansiedad, irritabilidad estrés, desmotivación, entre otros, los cuales van a afectar su diario vivir, la forma en cómo perciba su entorno y como se desenvuelva en él.

La motivación en el adulto mayor debe ser tanto intrínseca como extrínseca y debe existir un equilibrio entre ellas, ya que, si hay un adulto motivado, pero no tiene un apoyo externo, perderá el interés por realizar las actividades cotidianas las cuales las llevó a cabo durante toda su vida, así como actividades nunca antes realizadas las cuales aporten experiencias nuevas y disfrute. Lo mismo sucederá si el medio externo es el que motiva al adulto, pero este no tiene la predisposición necesaria para poder hacer algo; más allá de que externamente se lo pueda motivar y éste reaccione positivamente al estímulo.

Precisamente la motivación es un aspecto muy importante a tratar en esta población, ya que una persona motivada es una persona activa y productiva, por lo cual, la motivación es una estrategia válida. Y esto es algo que se busca alcanzar con el adulto mayor, hacerles ver que más allá de la edad son personas que aún pueden mantener una estabilidad emocional, la cual le facilita el desenvolvimiento en su entorno.

La recreación es una herramienta la cual nos permite generar alternativas distintas para un envejecimiento saludable, tanto a nivel físico, social y psicológico, es decir un desarrollo integral de la persona. Pues es la recreación, la cual nos permite satisfacer necesidades inmediatas y a largo plazo, permitiendo el disfrute de experiencias nuevas sin desmerecer ningún tipo de población.

Para poder alcanzar este fin la recreación se basa en 13 áreas, las cuales son: acuática, físico deportiva, aire libre, literaria, manual, artística, lúdica, aficiones y entretenimiento, técnica, conmemorativa, social, de la salud y comunitaria. Las cuales nos permiten diseñar y planificar actividades acordes a la población, generando alternativas que nos ayuden a dar solución al problema de la población mayor.

Desde este punto de vista la recreación permite cambiar estilos de vida generando algunos factores positivos en el adulto mayor.

La vejez es una de las épocas más hermosas de la vida, pero también muy mal tratada por muchas personas, Dios nos ama y desea una vida feliz y precisamente por ello, es que los que ya estamos en esta edad estamos obligados a procurarnos por cuenta propia a hacernos esta etapa de vida más placentera de lo que la sociedad materialista actual la ha convertido.

Leí un articulo sobre este tópico y tropecé con un decálogo para los adultos mayores el cual me pareció interesante y deseo compartir como una buena propuesta de cosas a hacer para sentirnos mejor:

1.    Cuidarás tu presentación todos los días. Vístete bien, arréglate como si fueras a una fiesta. Qué más fiesta que la vida.

2.    No te encerrarás en tu casa ni en tu habitación. Nada de jugar al enclaustrado o al preso voluntario. Saldrás a la calle y al campo de paseo. El agua estancada se pudre y la máquina inmóvil se enmohece.

3.    Amarás al ejercicio físico como a ti mismo. Un rato de gimnasio, una caminata razonable dentro o fuera de casa. Tan solo pon un poco de diligencia.

4.    Evitarás actividades y gestos de viejo derrumbado. La cabeza gacha, la espalda encorvada, los pies arrastrándose. ¡No! Que la gente diga un piropo cuando pasas.

5.    No hablarás de tu vejez ni te quejarás de tus achaques. Con ello, acabarás por creerte más viejo y más enfermo de lo que en realidad estás. Y te harán el vacío. Nadie quiere estar oyendo historias de hospital. Deja de auto llamarte viejo y considerarte enfermo.

6.    Cultivarás el optimismo sobre todas las cosas. Al mal tiempo buena cara. Sé positivo en los juicios, ten buen humor en las palabras, sé alegre de rostro, amable en los ademanes. Se tiene la edad que se ejerce. La vejez no es cuestión de años sino un estado de ánimo.

7.    Serás útil a ti mismo y a los demás. No eres un parásito ni una rama desgajada voluntariamente del árbol de la vida. Bástate hasta donde sea posible y ayuda. Ayuda con una sonrisa, con un consejo, un servicio.

8.    Trabajarás con tus manos y tu mente. El trabajo es la terapia infalible. Cualquier actitud laboral, intelectual, artística... Medicinas para todos los males, la bendición del trabajo.

9.    Mantendrás vivas y cordiales las relaciones humanas. Desde luego que las que anudan dentro del hogar, integrándose a todos los miembros de la familia. Ahí tienes la oportunidad de convivir con todas las edades, niños, jóvenes y adultos, el perfecto muestrario de la vida. Luego ensancharás el corazón a los amigos, con tal que los amigos no sean exclusivamente viejos como tú. Huye del bazar antigüedades.

10. No pensarás que todo tiempo pasado fue mejor. Deja de estar condenando a tu mundo y maldiciendo tu momento. Alégrate de que ser parte del mismo y poder ver muchas cosas lindas y nuevas.

¡No te olvides de reír a menudo para mantener la salud!

Autor Anónimo

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