viernes, 3 de agosto de 2012

Es Requisito La Regeneración



Para llegar al cielo se necesita mas de una escalera grande y otra chiquita.

“Nicodemo le dijo: ¿Cómo puede un hombre nacer siendo viejo? ¿Puede acaso entrar por segunda vez en el vientre de su madre, y nacer? Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.  Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.”Juan 3:4..6

Quiero confesar que no tengo mucho interés en los deportes, aun así, si hay algún buen partido del deporte que sea lo veo, siempre y cuando sea gratis y en tiempo de ocio.  Pero nunca compro boletos.  Realmente no me interesa mucho los deportes. No tengo nada en contra de fútbol o los demás deportes, simplemente tengo otros intereses.

Mi indiferencia a los deportes, es una buena ilustración de como muchos reaccionan a las cosas de Dios. No tienen realmente un gran interés en la Biblia, en la alabanza, en conocer a otro cristianos, en la oración. 

Tienen otros intereses, prefieren hacer otras cosas. Quizás asistan a una iglesia, como Nicodemo, tal vez son oficialmente parte de una religión, pero el contacto directo con Dios, por medio de la oración, las alabanzas, la predicación, no es ninguna prioridad en su vida. Se sorprenden por la cantidad de tiempo, que dedicamos a la fe, a hablar de lo que Dios está haciendo en nuestras vidas, el tiempo dedicado en el servicio de Dios.

Pero es que en Cristo, la persona es regenerada y tiene otros intereses.  Esta cambiado.   (2 Corintios 5:17..21) Tus deseos, tus intereses, las pasiones de tu corazón tienen que ser cambiados por esta regeneración o si no, no hay ninguna esperanza de participar en el reino de Dios. Es una obra de Dios, y no de hombre (Tito 3:4..7). Tenemos que tener un cambio y nunca se es viejo para tenerlo.

¿Porque en la historia del hijo prodigo, el hermano menor (el prodigo) recibió el mejor vestido y el anillo de su padre regresando a casa?  Estaba ya diferente.  Cambiado por el arrepentimiento, no fue la misma persona que dejo la casa de su padre con ganas de conocer el mundo. Lucas 15:32. La celebración era por causa de esto, el cambio en su vida. Y nunca se es viejo para dar este cambio.

Dice en Tito 3:5 que hay una lavamiento de nuestra naturaleza, en la regeneración. Dios está lavando a nosotros de la suciedad de la naturaleza vieja, dándonos una vida nueva, somos una obra nueva en Cristo Jesús.

El hombre en su estado natural es un hijo de ira, no entiendienden las cosas del Espíritu porque son una locura para él. El hombre natural tiene un corazón de piedra según Ezequiel 36:25..26. No necesariamente porque es tan duro, sino que simplemente no tiene vida.  Espiritualmente no esta vivo, está muerto.

Génesis 5:3  Estamos nacidos en la imagen de Adán, pero al llegar a Cristo, somos renacidos en la imagen de Cristo. 

Si no conoces aun a Cristo íntimamente te es necesario, nacer de nuevo. Porque no puede el hombre entrar en el reino de Dios con esa naturaleza vieja.

A un perrito, cubierto de lodo y que huele mal, no le es permitido entrar a la casa, correr a la recamara y subir a la cama para acostarse en la almohada, seria ridículo. Y así, nosotros con la naturaleza vieja, no podemos ir y morar en el palacio de Dios en los cielos si nuestra naturaleza no es cambiada, transformada. Vuelvo y repito, es necesario, nacer de nuevo.

Quizás has tenido un encuentro con el evangelio, pero piensas en tu corazón, prefiero hacer otras cosas, esto no me interesa.

Pero es bueno que sepas que los que caminamos en Cristo, estamos aprendiendo a alabar a Dios, ensayando para estar en la presencia de Dios en el cielo.  Para ir a este lugar donde El mora.  Como un hombre de negocios, en preparación de ir a otro país, aprende sus costumbres, su idioma, nosotros nos estamos preparando a ir a otro lugar, donde tenemos nuestra verdadera ciudadanía. Nuestra ciudadanía está en los cielos (Filipenses 3:20). Cuando uno quiere ser ciudadano de un país, hay que saber su historia, su gobierno, sus tradiciones.  Y así nosotros, estamos preparando, aprendiendo de esa ciudad de Dios.

Sabemos que seremos recibidos. (Hebreos 10:16..25)... ¿qué si tenemos una garantía?   Sí... Efesios 1:13..14

Pregunta: ¿Estas tu en Cristo? O estas simplemente mirando todo lo que pasa en el mundo o en tu iglesia.

En el día del gran diluvio, seguramente había muchos que venían y miraban a la barca de Noé, cuando empezó a llover, pero poco a poco, las olas del agua los llevaron y ahogaron, porque no estaban dentro de la arca, estaban todavía afuera, aunque muy cerca.

Si alguno está en Cristo, nueva criatura es. La vida muy corta, los años pasan volando, en muy poco tiempo o en cualquier momento sabrá por seguro, si está realmente en Cristo o simplemente mirando las cosas de Dios como un observador.

Los que son nacidos de nuevo pasan por cuarto puertas.  La primera es...

1)   La elección.

2 Tesalonicenses 2:13..14 “Pero nosotros debemos dar siempre gracias a Dios respecto a vosotros, hermanos amados por el Señor, de que Dios os haya escogido desde el principio para salvación, mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la verdad,  a lo cual os llamó mediante nuestro evangelio, para alcanzar la gloria de nuestro Señor Jesucristo.”

2)  Tener una parte en la muerte de Cristo Jesús.  Tener un interés en lo que pasó, en la cruz de calvario.

Hay gente que traten de servirse de Cristo. Buscan el perdón pero no la pureza. Quieren ser libres de la culpabilidad, pero no quieren nada que ver con la santidad.

3)  Las escrituras.

Debemos saber con que autoridad podemos confiar en nuestra posición con Dios.  Simplemente confiar en que todo está bien, sin ninguna promesa es presumir horriblemente con Dios.  Debemos saber cuales son sus promesas y como esas promesas aplican a nuestras vidas.

“El que aparta su oído para no oír la ley, Su oración también es abominable”  Proverbios 28:9. “Hay camino que al le parece derecho; pero su fin es camino de muerte”   Proverbios 14:12

4)  La común unión (comunión) con Él.

Génesis 5:21..24 “Vivió Enoc sesenta y cinco años, y engendró a Matusalén.  Y caminó Enoc con Dios, después que engendró a Matusalén, trescientos años, y engendró hijos e hijas.  Y fueron todos los días de Enoc trescientos sesenta y cinco años.  Caminó, pues, Enoc con Dios, y desapareció, porque le llevó Dios.”

¿Andarán dos juntos, si no estuvieron de acuerdo? Muchos dicen: No, pues estoy andando en pecado constante, pero Dios entiende, mí Diosito me quiere.

No os engañéis...  El que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios.

Posiblemente te estarás preguntando ¿por qué todo esto? ¿En que me interesa a mí? O posiblemente te dirás: ya estoy viejo ¿Para qué? Otros podrán decir: Si aun estoy joven ¿para qué?... Déjame decirte que: el día, la hora y el momento para irte de este mundo, nadie la sabe, solo Dios... No te parece que es mejor estar prevenido... PIÉNSALO.

No hay comentarios:

Publicar un comentario