viernes, 18 de mayo de 2012

Mascotas: Un Beneficio Mutuo


Muchas personas se limitan de la agradable y gratificante relación que puede existir entre un ser humano y su mascota. En nuestro hogar existen diferentes mascotas pájaros, ardillas, tortugas y gato. De todos se goza un momento y son entretención ante las presiones cotidianas, ayudando a alejarnos del estrés de la vida actual.

Las ventajas de tener una o varias mascotas son múltiples: ternura, cariño, compañía, amistad, etc. Su presencia en nuestro hogar convierte el espacio en un lugar alegre y acogedor. Además, estas virtudes se ven acrecentadas cuando nuestra vida esta iniciándose o pasando de los 55ymás. En estos momentos es cuando el hecho de contar con un ser que nos transmita afecto se convierte, en variados casos, en una necesidad básica.

En el caso de una persona de edad mayor, la posible aparición de la melancolía, ya sea por la viudez o por la imposibilidad de ser cuidado por su familia, puede hacerse más aceptable con una mascota; disfrutar a diario de un perro o un gato le ayudará a seguir adelante de una manera mucho más optimista y saludable.

Los perros y los gatos son los que han demostrado aportar más ventajas físicas y psicológicas sobre las personas de la tercera edad como mascotas terapéuticas; aunque podría tratarse de cualquier otro animal doméstico, dócil y entrenado

La mayoría de las personas muestran una actitud positiva a través de su relación con una mascota. Las observaciones efectuadas hasta el momento demuestran que se pueden conseguir importantes mejoras en problemas de tipo psicológico y físico gracias al apoyo de un animal doméstico.

Mayor movilidad, más amigos, menos medicinas y un aumento de la sensación de bienestar son algunos de los aspectos positivos que aportan a la gente mayor. El hecho de cuidar de un animal, manteniendo la cabeza ocupada, es otra gran virtud de nuestro amigo. Además, debemos pensar en lo agradable que puede ser para una persona que se ha quedado sola contar con un pequeño compañero en casa que le haga la vida más alegre y le haga olvidar sus penas.

Cualquier mascota puede mitigar la sensación de soledad de una persona, pero no cualquiera es apropiada como animal de compañía, si no cumple el objetivo de facilitar la vida diaria de la persona. Una característica determinante para que sea apto o no, es el peso del animal, que no deberá superar las 20 libras. Cuidados como baño, paseos al aire libre y juegos son sólo llevaderos para una persona de avanzada edad cuando el animal tiene un peso y tamaño razonable

La presencia de estas mascotas en casa puede tener múltiples significados para una persona mayor. Hay quienes se sienten más seguros al tener un perro como guardián, otros lo ven como una motivación para salir a caminar todos los días y otros como una manera de expresar y desarrollar vínculos afectivos y alejar la soledad. Lo cierto es que todos estos efectos positivos pueden lograrse a partir de una misma mascota.

Las investigaciones que se han llevado a cabo en el campo de los animales de compañía han sido muy fértiles. Una persona mayor puede beneficiarse de la compañía de los animales, siempre y cuando ésta tenga muy claro que no sólo lo desea, sino que también puede hacerlo.

Para la gente mayor, la convivencia con un animal puede transmitir mucha vitalidad; incluso llegan a vivir más tiempo y con mayor calidad. El hecho de tener la responsabilidad de dar de comer a su mascota, llevarlo al veterinario, cuidar su aspecto físico, etc. supone realizar más ejercicio y por tanto, la consecuente mejora de su salud. Igualmente, acariciar al animal, sentir sus mimos y su necesidad de cuidados, son grandes puntos a favor del uso de animales en el tratamiento contra la depresión.

Entretenimiento, relajación y equilibrio emocional son algunos de los beneficios demostrados. Incluso, varias investigaciones han evidenciado que aumentan y mejoran la vida en enfermos cardíacos. Por tanto, nada mejor que un buen y leal amigo para combatir los pesares al llegar la vejez.

La misma actividad de pasear al animal puede acercar a personas que tengan interés común por los animales. Es así como niños, adultos y personas de la tercera edad pueden intercambiar palabras, conocer nuevas amistades y compartir tiempo de esparcimiento. Es una motivación para salir de la casa, contagiarse de la juventud y mantener un espíritu igual de joven. El propio vínculo con el animal ya es un agente socializador. Hace que la persona mantenga su pensamiento ocupada en otro ser que depende de ella. Es la razón por la que se recomiendan gatos y perros, dos especies de animales con las que se puede establecer una comunicación bilateral.

Tener una mascota nos puede cambiar la vida a cualquiera, pero lo que hay que tener en cuenta de que cualquier mascota no es para cualquier tipo de situación, de persona o de hogar y si hay una edad en la cual el ser humano precisa compañía es cuando está en la tercera edad, pero está debe de cumplir con características apropiadas para que este lo pueda cuidar.

Muchos de nosotros tenemos algún familiar mayor que nos gustaría ver más, pero el estilo de vida de hoy en día no nos permite visitar a nuestros mayores de la manera que quisiéramos y por otro lado también nos pasa que los vemos muy solos y nos causa una sensación de pena. Para esas personas mayores que conservan un estado de ánimo entusiasta no hay nada mejor que regalarle una mascota. Esta les cambiará la vida, ya que tendrán compañía pero también tendrán un ser con personalidad que los sorprenderá día a día.

Si somos nosotros los que queremos sorprender con la llegada de una mascota a la casa de nuestro ser querido o si es él quien nos pide que lo ayudemos a buscar una mascota que se adapte a su situación debemos de tener en cuenta varios factores: el primero y quizás el más importante es el tamaño y comodidades de la casa. Tiene que ser proporcional a la misma, si fuera un piso se debe de procurar una raza de gato o perro que guste de vivir en el interior y si fuera una casa con gran espacio verde se podría tener una raza de mascota que gustara del verde.

El otro factor es el estado físico y mental en el cual está la persona que desea la mascota, si es una persona que está un poco olvidadiza y que no está en la mejor condición física, alguien más debe de encargarse del cuidado de su mascota, por eso es bueno que tengan mascotas con menos actividad, pero que le den vitalidad a su día a día a día, como pueden ser peces o pájaros de diferentes tipos.

Si por el contrario, la persona se encontrara con un buen estado físico, es recomendable que tuvieran una mascota ágil y divertida para seguir con su estilo de vida, como un perro, estos lo llevan a hacer ejercicios y a un buen nivel de socialización con otros dueños de perros, lo cual es altamente beneficioso a esta edad.

Lo más importante de tener una mascota es también cumplir con Dios, en cuanto cuidar su creación, todas las iglesia o comunidades deberían tener entre sus ministerios uno que se encargue del bienestar de los animales.

Habrá un tiempo en el cual todos los animales vivirán juntos en paz y no habrá más sufrimiento (Isaías 65:25). Este es el deseo de Dios. Los cristianos debemos practicar la compasión de Dios a todo lo que El ha creado (Salmo 145:9). Siendo sus hijos adoptivos y hechos a su imagen, nosotros debemos seguir su mandato de cuidar y proteger toda Su creación (Génesis 1: 26..30).

Hay tantas cosas que puede hacerse desde una iglesia en cuanto al cuidado de los animales que nos sirven de mascota y aun los que no, entre estas cosas están:
·        Enseñar compasión por los animales en Iglesias de niños y animar a su pastor para que desde el pulpito, promueva el bienestar animal.
·        Repartir propaganda en lugares públicos y eventos cristianos.
·        Programar un servicio de entrega de comida para animales que asista a aquellas personas a las que se les dificulta alimentar sus mascotas.
·        En los servicios religiosos honrar a aquellos miembros de la comunidad que han mostrado interés y compasión por los animales.
·        Apoyar el bienestar animal escribiendo cartas a editores en los periódicos.
·        Cuidar temporalmente a un(a) perro(a) o gato(a), o adoptar uno(a).
·        Ser voluntario club de animales o en un grupo de rescate.
·        Ayudar a los animales.

No por gusto Dios creo a los animales y estos están al servicio de nosotros hasta en los últimos días.

Y tu ¿Qué mascotas tienes?

No hay comentarios:

Publicar un comentario