viernes, 1 de mayo de 2015

El Dolor En La Tercera Edad


Pareciera ser que la artritis es la causa más común de dolor para las personas mayores de 65 años, pero problemas circulatorios, ciertas enfermedades intestinales y el cáncer son otras de las razones para el dolor.

El dolor puede llevar a otros problemas. Las personas con dolor pueden perder la capacidad para moverse y realizar actividades cotidianas. Ellos también tienen a menudo la ansiedad o la depresión. Pueden estar en mayor riesgo de sufrir caídas, pérdida de peso, falta de concentración y dificultades con las relaciones.

La mayoría del dolor se puede controlar, por lo general a través de una combinación de estrategias no farmacológicas de drogas, lo que se debe discutir con un medico.

Las personas mayores con dolor son los únicos que saben la cantidad de dolor que están sintiendo. El dolor es lo que la persona mayor dice que es y existe cada vez que él o ella dice que le afecta. Si las personas con dolor perciben que otros no creen, ellos se molestan y pueden dejar de informar su dolor con precisión. Esto hace que la localización del dolor más difícil. Toda persona tiene el derecho a una buena Control del dolor.

Si usted cuida o tiene en su familia un adulto mayor procure proporcionar un buen control del dolor. Consulte al medico si el dolor no mejora con el tratamiento y pídales a probar nuevos tratamientos hasta que se controle el dolor. Su compromiso es ayudar a evaluar y aliviar el dolor y mantener al medico informado sobre los niveles de dolor y las respuestas a su tratamiento.

¿Que se puede hacer para ayudar a evaluar el dolor?
·       Preguntar sobre el dolor. No existe una prueba médica puede decirle si una persona mayor está con dolor. La mejor manera de saber es preguntar. Una buena forma de preguntar es decir: ¿Qué tan grave es su dolor en este momento en una escala de 0 a 10, siendo 0 la ausencia de dolor y 10 el peor dolor que has tenido? No contradecir o discutir sobre estas calificaciones .
·       Las personas mayores pueden usar diferentes palabras para describir su dolor, como el "malestar"
·       Busque un comportamiento o lenguaje corporal que podría ser una respuesta al dolor. La persona mayor puede no estar dispuestos a reportar dolor o no puede comunicar el dolor en palabras. Observe si hay expresiones faciales o gemido cuando se mueven.

Hay que mejorar las posibilidades de obtener buen Alivio del Dolor
·       Utilice medicamentos para el dolor según lo prescrito. Si la receta dice como tomar el medicamento en ciertos momentos o intervalos de tiempo, hágalo. No espere hasta que el dolor se vuelve a dar. Esto causará un sufrimiento innecesario. Tiene que haber una cierta cantidad de medicamento en la sangre antes de que pueda reducir el dolor. Por ello, el médico le receta tomando el medicamento para el dolor a intervalos regulares, para asegurarse de que los niveles en sangre se mantienen lo suficientemente alto.
·       Insista en buen control del dolor. Asegúrese de que el médico entienda que hay un problema de dolor y hágale saber si el tratamiento no está funcionando o no satisface las necesidades de la persona mayor.

A veces los síntomas no son una emergencia, pero deben ser reportados

Los siguientes síntomas deben ser reportados durante las horas regulares de oficina. Llame al médico si presenta cualquiera de las siguientes condiciones:
·       Sin alivio después de tomar medicamento para el dolor según lo prescrito
·       Algunos alivio del dolor, pero aún hay mucho dolor 1 o 2 días después de comenzar la medicina
·       Un nuevo tipo de dolor, dolor en nuevos lugares o un nuevo dolor al mover o sentado
·       Si muestra efectos secundarios adversos de los medicamentos para el dolor

En caso de emergencia, acuda inmediatamente al médico si se presenta alguna de las siguientes situaciones:
·       Cambio en la capacidad de caminar o llevar a cabo otras actividades importantes debido al dolor
·       Cambios en el sueño
·       La incapacidad para lidiar con el dolor

Si llama por una emergencia, conocer estos hechos Antes de llamar:

·       Cuánto tiempo ha soportado el dolor
·       Es un dolor nuevo o ha ocurrido antes
·       Donde está localizado ¿Está en más de un área? Si es así, qué lugar es más molesto.
·       ¿Qué tan grave es el dolor? Pídale a la persona mayor para calificar el dolor en una escala de 0 a 10, donde 0 = sin dolor, 5 = dolor moderado, 10 = peor de todos.
·       Es un dolor agudo y punzante o sordo y molesto
·       Como se siente el dolor: Por ejemplo, se quema el dolor o se siente como una descarga eléctrica.
·       Hay algún entumecimiento u hormigueo.
·       Cómo afecta el dolor interfiere con la realización de las actividades normales. ¿Qué actividades o condiciones empeoran el dolor?
·       ¿Qué se ha hecho para aliviar el dolor?
·       ¿Qué medicamentos se están tomando? ¿Se han tomado las medicinas a horas fijas o simplemente cuando la persona los necesita? ¿Es la persona alérgica o con sensibilidad a cualquier medicamento para el dolor?

Ayuda a reducir el dolor
·       Utilice duchas calientes, baños, bolsas de agua caliente o paños calientes. El calor relaja los músculos, que pueden ayudar a reducir el dolor y le da una sensación de confort.
·       Utilice paños fríos o hielo. El enfriamiento de la piel y los músculos puede calmar el dolor, especialmente el dolor que proviene de la inflamación o hinchazón.
·       Coloque a la persona cuidadosamente en almohadas y cojines de asientos blandos.
·       Fomente la relajación. Respirar lentamente y en silencio ayuda a la mente y el cuerpo se relajen y ayuda a disminuir el dolor. Métodos de relajación simples pueden ser extraídas de libros o cintas de audio sobre las técnicas de relajación.
·       Evitar situaciones de estrés cuando sea posible.

Compruebe los Resultados
·       Pregunte regularmente sobre el dolor y guarde sus anotaciones. El adaptarse a un analgésico puede llevar su tiempo, por lo que el cambio puede ser lento. Mantenga el médico o la enfermera informado sobre cambios en el dolor.

En muchas ocasiones, la mejor forma de ayudar a aliviar un dolor, es solidarizándote con su dolor. Muchas veces no tienes que decir mucho, tu sola presencia, compañía, apoyo y un abrazo dicen mas que mil palabras.

Tenga presente que la Palabra de Dios, da confort para aquellos que están experimentando dolor y sufrimiento. Ya sea dolor físico o sufrimiento emocional, la palabra de Dios es un consuelo para aquellos que verdaderamente buscan la sabiduría .

¿Estás experimentando algún tipo de dolor en tu vida hoy? Te animo a leer estos versículos de la Biblia y que sirvan para darte la verdadera paz.

El Señor es mi roca y mi fortaleza

Salmo 18:2 “Jehová, roca mía y castillo mío, y mi libertador; Dios mío, fortaleza mía, en él confiaré; Mi escudo, y la fuerza de mi salvación, mi alto refugio.”
Salmo 34:18 “Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; Y salva a los contritos de espíritu”

Jesús sintió dolor

Hebreos 2:18 “Pues en cuanto él mismo padeció siendo tentado, es poderoso para socorrer a los que son tentados”

El dolor conduce al arrepentimiento

2 Corintios 7:9..10 “Ahora me gozo, no porque hayáis sido contristados, sino porque fuisteis contristados para arrepentimiento; porque habéis sido contristados según Dios, para que ninguna pérdida padecieseis por nuestra parte. Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación, de que no hay que arrepentirse; pero la tristeza del mundo produce muerte.”

Esperanza en el futuro

Apocalipsis 22:4..5 “y verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes. No habrá allí más noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol, porque Dios el Señor los iluminará; y reinarán por los siglos de los siglos”





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