viernes, 3 de abril de 2015

No Fuimos Creados Para Vivir En Soledad Y Menos En La Tercera Edad


En el libro del Génesis Dios dice: "No es bueno que el hombre esté sólo" (Génesis 2.18) Y por eso decide crearle una compañera, que sea su complemento. Cuando el primer hombre ve a su compañera se llena de alegría y exclama: "Esta sí es carne de mi carne, y hueso de mis huesos" (Génesis 2.23), es decir, que la compañera que Dios le crea es semejante a él, es una compañera adecuada con la que se puede comunicar y vivir relacionado con ella.

Todo esto nos quiere indicar que desde el principio de la creación Dios hizo a la persona humana como un ser social, para que no viva solo, sino en compañía, en relación con otros. Sin los demás, si alguien semejante con quien relacionarse, la persona se siente sola, incompleta (Génesis 2.20). El ser humano necesita a los demás, necesita tener alguien con quién comunicarse. Somos seres sociales por naturaleza, somos creados para vivir en relación con los otros, para vivir en comunicación con los demás, para vivir en sociedad.

  • ¿Qué es la comunicación?

Tenemos que empezar diciendo que la comunicación es el medio fundamental por el cual las personas se relacionan unas con otras. La comunicación es una realidad de la que todos tenemos experiencia, porque desde pequeñitos hemos vivido en comunicación con los demás. Es algo que todos comprendemos y que casi no hace falta explicar. Comunicar significa entregar algo nuestro a los demás y recibir algo de ellos. Ese algo puede ser una idea, un sentimiento, la propia forma de ser y pensar. Es decir algo a los demás y escuchar lo que ellos nos dicen. La comunicación es un intercambio entre las personas, es darse a los demás y recibirlos.

La comunicación es un proceso humano, porque se da entre personas y necesita básicamente de tres elementos para que se pueda realizar. En primer lugar, para que haya verdadera comunicación se necesita de una persona que diga algo. En segundo, lugar se necesita de otra persona que reciba lo que la primera persona dice. Y en tercer lugar, se necesita que haya un mensaje que se transmita.

Si falta uno de estos tres elementos no hay una verdadera comunicación. Si no hay una persona que dice algo, no hay comunicación. Y si una persona dice algo pero no hay otra persona que reciba su mensaje, no hay comunicación. Pero si no hay un mensaje que se transmita y se reciba, tampoco hay comunicación. Si uno dice "dos" y el otro entiende "tos", no hay verdadera comunicación.

  • Los peligros de la Soledad

La amistad es muy parecido a la comida. Lo necesitamos para sobrevivir. Los Psicólogos han encontrado que los seres humanos tienen una necesidad fundamental para su inclusión en la vida del grupo y de las relaciones cercanas.


La conclusión es, que funcionamos mejor cuando se cumple esta necesidad social. Es más fácil mantener la motivación, para satisfacer los variados desafíos de la vida.

De hecho, la evidencia ha ido demostrando que cuando no se cumple nuestra necesidad de comunicación social, decaemos mental y hasta físicamente. Hay efectos sobre el cerebro y en el cuerpo. Algunos efectos funcionan de manera sutil, a través de la exposición de los múltiples sistemas del cuerpo a cantidades excesivas de estrés. Sin embargo, los efectos son lo suficientemente distintos para medir el paso del tiempo, por lo que las necesidades sociales insatisfechas tienen un grave efecto en la salud, la erosión de nuestras arterias, creando una presión arterial alta e incluso socavan el aprendizaje y la memoria o derivándose en un Síndrome del Corazón Roto (1)

A falta de los amigos cercanos y la escasez de contacto social generalmente llevan el malestar emocional o angustia a lo conocido como la soledad. Comienza con una conciencia de una deficiencia de las relaciones. Este cognitivo conciencia juega a través de nuestro cerebro con una banda sonora emocional. Nos hace triste. Podemos sentir un vacío. Podemos estar llenos de un anhelo de contacto. Nos sentimos aislados, alejados de los demás, privados. Estos sentimientos arrancan en nuestro bienestar emocional.

A pesar de los efectos negativos de la soledad, difícilmente puede ser considerado anormal. Es un sentimiento más normal. Todo el mundo se siente solo a veces, después de una ruptura con un amigo o amante, cuando nos movemos a un nuevo lugar, cuando nos estamos excluidos de alguna reunión social.

La Soledad Crónica es algo completamente distinto. Es uno de los marcadores más seguras en existencia para inadaptación.

En los adultos, la soledad es un desencadenante de la depresión y el alcoholismo. Y cada vez parece ser la causa de una serie de problemas médicos, algunos de los cuales llevan décadas en aparecer y hasta conducen a la muerte.

El psicólogo John Cacioppo, de la Universidad de Chicago ha dado seguimiento a los efectos de la soledad. Realizó una serie de nuevos estudios e informó de que la soledad funciona en sorprendentes formas de complicar la salud.
- En una encuesta que llevó a cabo, los propios médicos confiaron que proporcionan una mejor o más completa atención médica a los pacientes que tienen las familias que le apoyan y no están socialmente aislados.
- Vivir solo aumenta el riesgo de suicidio para los jóvenes y viejos por igual.
- Individuos solitarios reportan niveles más altos de estrés, incluso cuando se expone a los mismos factores de estrés como la gente no solitaria.
- La soledad aumenta los niveles circulantes de las hormonas del estrés y los niveles de presión arterial. Socava la regulación del sistema circulatorio por lo que el músculo del corazón trabaja más duro y los vasos sanguíneos están sujetos a daños por la turbulencia del flujo sanguíneo.
- La soledad destruye la calidad y eficiencia del sueño, por lo que es menos restaurativa, tanto física como psicológicamente. Se despiertan más por la noche y pasan menos tiempo en la cama.

Cacioppo concluye, que la soledad pone en marcha una variedad de eventos que "poco a poco desarrollan procesos fisiopatológicos."

En otras palabras, estamos hechos para el contacto social. Hay consecuencias graves, potencialmente mortales cuando no obtenemos suficiente comunicación. Las habilidades sociales son cruciales para su salud.

Como hemos dicho desde el principio, hemos sido creados para vivir en relación con los demás. Somos seres sociales porque vivimos en sociedad, en relación con otros. La sociedad es el espacio en el que vivimos esa relación con los demás. Y está organizada y reglamentada por leyes y normas sociales para garantizar la buena convivencia entre todos. Por eso tenemos que conocer cómo está organizada y ayudar viejos y jóvenes a mejorar la sociedad en que vivimos, para vivir mejor en ella.

(1) Un estrés físico o emocional intenso, como la pérdida de un ser querido o una fuerte discusión, puede rompernos literalmente el corazón. El "síndrome del corazón roto" o cardiomiopatía de Takotsubo presenta síntomas similares a los de un ataque cardíaco, como dolor en pecho y dificultad para respirar. Pero normalmente es temporal, no deja secuelas, y no afecta a las arterias coronarias como un infarto, sino al músculo cardíaco. ¿Qué lo provoca? Según un estudio publicado a mediados de 2009 en la revista American Journal of Cardioloy, el trastorno parece deberse a un aumento en el nivel de hormonas relacionadas al estrés, como la adrenalina. Las arterias no se ocluyen, sino que es el músculo cardíaco el que se resiente y debilita, hasta el punto de que el ventrículo izquierdo adquiere una forma cónica.



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